Muerde la inocencia el cosmos
y el duro conocimiento es un chirlo
en la falleba
Cayó la cortina sobre el monte
y hacia el norte huyen los chacales
Los jinetes lloran
y las extrañas palabras buscan el papel
Azotes de violetas en el cielo
y una estrella moribunda
¡La derrota es de los ojos
el tiempo breve no se alquila!
Fugaz intromisión y una paciencia oscura
vendaval en la terraza
(sueña la primavera un hijo
mientras copula con el viento)
¡Hacia ti la tarde espera en el refugio
de tus brazos maternales!
El hijo nacerá sobre las ramas
en un criterio de madera
El ciclo es peremne
como la ausencia
Lueven partículas de conciencia
sobre el tejado
Hay una ventana reflejada en la pared
y nadie puede abrirla...
¡son los años que se entregan al olvido,
en esta tarde en violeta!
