ESTIRPE DE SILUETAS
Toscas ramas que marzo a podrido
por el influjo del otoño
buscan su militancia en el río
tras selvas y amaneceres
para integrar una postal
que dé gracia a su tiempo.
Un viento breve ondea las aguas
las toscas ramas que marzo a podrido
navegan por el río
y beben el verso de la corriente amiga
hasta sentir la pura esencia
de su libertad en ese nicho.
En su vientre henchido de felicidad
el río contempla a las ramas
y le regala su mejor estancia
también les augura un invierno posible
entre noches ausentes de grillos
pero jugosa de labios de luna.
Ya todo es imagen, romanza y latido
del verso que surge de la amistad constante
Toscas ramas que marzo a podrido
por el influjo del otoño
navegan por el río...
y ya los ánimos del viento se han calmado
dejando pacer a las almas piadosas
una estancia mejor
sobre la gracia del río.
¡Y todo el bosque sueña en un fugaz albedrío
con desnudar su piel en un sentir de marzo!